Barcelona es una ciudad ideal para moverse en bicicleta. Con una red creciente de carriles bici, un clima amable durante la mayor parte del año y rutas que combinan mar, arquitectura, parques y cultura, pedalear aquí es más que un medio de transporte: es una forma distinta de vivir la ciudad.
Si estás pensando en explorar la capital catalana a dos ruedas, toma nota de estas rutas recomendadas para todos los niveles, desde paseos suaves hasta aventuras con más pendiente. Pedalea a tu ritmo y descubre otra cara de Barcelona.
Paseo marítimo: de la Barceloneta al Fòrum

Una de las rutas más accesibles y agradables. Parte desde la playa de la Barceloneta y llega hasta el Parc del Fòrum, recorriendo el litoral por carriles bici seguros y llanos. En el camino pasarás por el Port Olímpic, la playa de Nova Icaria y zonas con terrazas frente al mar, perfectas para hacer una pausa con vistas al Mediterráneo.
El recorrido es ideal para familias, personas que están empezando a pedalear por ciudad o quienes simplemente quieren disfrutar de un paseo relajado sin salir del centro. Además, cuenta con puntos de alquiler de bicicletas cerca, por lo que no necesitas traer la tuya.
Ruta modernista: de Plaça Catalunya a la Sagrada Família

Si te interesa la arquitectura, esta ruta es un regalo visual. Atraviesa el Passeig de Gràcia, donde descubrirás joyas como la Casa Batlló, La Pedrera o la Casa Amatller. El carril bici es cómodo y bien señalizado, y permite moverse sin prisas entre avenidas amplias y zonas comerciales.
La ruta culmina en la Sagrada Família, una de las obras más emblemáticas de Gaudí. Una buena idea es aparcar la bici y pasear a pie por los alrededores del templo para admirarlo con calma. También puedes combinar esta ruta con una parada en algún café o restaurante típico del Eixample.
Montjuïc: naturaleza, deporte y cultura
Montjuïc es la opción perfecta para quienes buscan combinar ejercicio, cultura y naturaleza. Eso sí: es una ruta con cuestas, por lo que se recomienda una bici eléctrica o estar preparado para sudar un poco. Las vistas desde la cima merecen cada pedaleo.
Durante el trayecto puedes pasar por el MNAC, el Castillo de Montjuïc, los jardines botánicos y el Estadio Olímpico. Además, hay varias fuentes y zonas para descansar a la sombra. Si te gusta el ciclismo urbano con un plus de naturaleza, esta es una de las rutas más completas.
Carretera de les Aigües: naturaleza y vistas sobre la ciudad
La Carretera de les Aigües, en la sierra de Collserola, es una de las rutas favoritas para quienes quieren escapar del tráfico y el ruido. Su nombre se debe a que antiguamente era una vía de mantenimiento para canalizaciones de agua. Hoy, es un camino de tierra firme, ancho, con poca pendiente y vistas espectaculares sobre la ciudad.
Para acceder puedes subir en el funicular hasta el Peu del Funicular (Vallvidrera), y desde allí empezar el recorrido. No es solo una ruta ciclista, también es muy popular para correr o caminar, así que hay que circular con respeto y precaución.
Poblenou y Bogatell: arte urbano y playa
Esta ruta es ideal para descubrir una Barcelona más local y moderna. Desde la Rambla del Poblenou hasta la playa de Bogatell, pasarás por antiguas fábricas convertidas en espacios culturales, paredes cubiertas de murales y cafés con mucho encanto.
Es una zona tranquila para pedalear y detenerse a explorar rincones únicos. Además, el barrio tiene carriles bici muy bien integrados, que permiten llegar fácilmente hasta la playa o conectar con otras rutas del litoral. Si te gusta la fotografía o simplemente explorar lo auténtico, este recorrido te va a encantar.
El Parc de la Ciutadella y alrededores

Una opción corta, céntrica y perfecta para principiantes o quienes buscan un paseo tranquilo en familia. El Parc de la Ciutadella permite recorrer senderos arbolados, ver la fuente monumental, e incluso alquilar una barquita en el estanque. Desde allí, puedes conectar con el barrio del Born o con el paseo marítimo.
Es ideal para descansar del ritmo urbano, hacer un picnic o simplemente disfrutar del ambiente relajado del parque más emblemático del centro de Barcelona.
Consejos prácticos para ciclistas urbanos
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Usa siempre el carril bici y respeta las señales de tráfico, semáforos y pasos de peatones.
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Evita las horas punta (de 8:00 a 9:30 y de 17:00 a 19:00) para moverte con más calma.
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Lleva casco aunque no sea obligatorio en ciudad. Siempre es recomendable.
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Utiliza un candado seguro, sobre todo si vas a dejar la bici en zonas concurridas.
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Lleva agua reutilizable y protégete del sol con gorra y crema solar.
¿No tienes bici? ¡No pasa nada!
Barcelona cuenta con una excelente oferta de alquiler de bicicletas. Puedes optar por opciones como:
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Donkey Republic, Green Bikes, Born Bike o Barcelona Rent a Bike.
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Bicicletas eléctricas disponibles en tiendas especializadas o en apps de uso compartido.
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Tours guiados en bici, que incluyen guía local, casco y paradas culturales.
Estas opciones son ideales para quienes no conocen bien la ciudad o prefieren descubrirla con un extra de información.
Pedalea con sostenibilidad
Moverse en bici no solo es divertido y saludable, también es una elección respetuosa con el medio ambiente. Barcelona apuesta por la movilidad sostenible y tú puedes sumarte a este cambio:
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Reduces emisiones contaminantes.
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Evitas atascos y estrés del tráfico.
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Conectas más directamente con el entorno y con los barrios que atraviesas.
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Fomentas un turismo más responsable y consciente.
Además, muchas rutas están conectadas con espacios verdes y proyectos que promueven el respeto al entorno, como huertos urbanos, zonas de biodiversidad o actividades culturales comunitarias.
Explorar Barcelona en bici es sinónimo de libertad, sostenibilidad y descubrimiento. Ya sea para disfrutar del mar, la arquitectura modernista o la tranquilidad de sus parques, pedalear te conecta con la ciudad de una forma más cercana y auténtica.
No hace falta ser ciclista profesional ni llevar equipo de alto rendimiento. Basta con tener curiosidad, ganas de moverse y espíritu de aventura. Así que, si estás planeando una visita a Barcelona, no dudes en incluir una bici en tu plan. Verás que la ciudad se transforma completamente desde el sillín.
Y si te alojas en uno de los hoteles Travelodge en Barcelona, como el de Poblenou o el del Vallès, tendrás la ubicación perfecta para empezar a pedalear desde el primer minuto. Con conexiones cercanas, comodidad y un ambiente acogedor, Travelodge es tu aliado ideal para descubrir Barcelona de forma sostenible, saludable y auténtica.
¿Estás listo para descubrir Barcelona a dos ruedas?